Llora Nervión

En un año y cuatro meses hizo llorar por dos veces a la afición sevillista. La primera, de alegría. La segunda, de inmensa tristeza. Antonio Puerta fue demasiado joven para marcar el gol que fue bautizado como aquel que cambió la vida del Sevilla; pero todavía ha sido más joven para fallecer.

Con su tanto a finales de abril de 2006 al Schalke en semifinales de la UEFA, “La zurda de diamante” abrió, casi sin quererlo, el período de mayores éxitos deportivos de la entidad rojiblanca. Provocó los primeros llantos de alegría en Nervión con esa espectacular volea que significaba el billete a la final de Eindhoven. Unas lágrimas que hoy no cesan, pero por motivos bien distintos. El infortunio ha querido que la vida de Puerta se fuera apagando sobre el mismo césped en el que él, un año y cuatro meses antes, había encendido la llama del éxito sevillista.

Pero el destino se ha querido cebar aún más con este joven de Nervión, ya que iba a ser padre en poco más de un mes. Su hijo se iba a llamar Aitor, pero la desgracia ha querido que se llame Antonio.

Al pequeño le contarán que su padre golpeó un balón caído del cielo para iniciar una etapa gloriosa en el Sánchez Pizjuán. También le relatarán cómo su padre levantó cinco títulos. Y que un día vistió con orgullo la camiseta de la selección. Pero lo más grande que le podrán contar a Antonio, lo que más le enorgullecerá, es que su padre fue la causa de que béticos y sevillistas se abrazaran llorando. Este gesto demuestra lo grande que era Puerta, por eso sigue llorando Nervión. Descansa en paz, crack.

3 goles:

Anónimo dijo...

Me uno al sentimiento de toda España. En el SEvilla habrá un antes y después de este trágico suceso.

Teixi dijo...

Creo que el Sevilla va a retirar su dorsal, un bonito gesto, y menudo problema para Monchi ahora, tras dejar marchar a David Castedo, la lesión de Adriano, y la trágica muerte de Puerta, el lateral izquierdo queda vacio.

saludos,

thepremier.blogspot.com

Alvaro dijo...

Llorar, llorar y llorar... qué lástima.