Dos horas que no se pagan con nada

No intente nada con nadie de 9 a 11 de la noche. Barcelona-Madrid –Sevilla colapsado. ¿Por el AVE? No, la Liga. Jornada 37, la clave de todo. Espanyol-Zaragoza-Mallorca, los aguantavelas de todo este entierro, ¿o quizás una boda? Dos serán los desterrados, el otro se alzará por encima de ellos. ¿Quién será? Un Español crecido y con ganas de “vendetta” por los gritos de “a segunda” de la pasada temporada; una Romareda que siempre es difícil con la bestia negra de los blancos sobre el césped; y un Mallorca que, de no ser que termina ya la Liga, aspiraría a puestos de UEFA.

Hoy el día tendrá 22 horas. Los transistores echarán fuego. Todos jugamos un mismo partido, desde el Mediterráneo al Guadalquivir pasando por la Meseta Central. ¿Y saben que es lo mejor? Que todavía queda una jornada de más infarto si cabe…si en ésta la Liga no se decide, que me extrañaría mucho. ¡Ahora, la suerte ya está echada!