No nos engañemos

No hablo de engaño por el juego de la selección, que es ejemplar. Tampoco lo digo porque Rusia sea una banda, no. Simplemente, creo que no debemos engañarnos porque España ha barrido a los de Hiddink por el estilo de juego de los rusos, que es homólogo al de la rojigualda. Es decir, obviando la dureza en el centro del campo y apostando por el balón. Por suerte, en esta batalla del tiki-taka, España está muy por encima de una Rusia con mucho ruido y pocas nueces.

España en general, y Villa en particular, han encontrado tantos espacios ante Rusia que la goleada podría haber sido de escándalo. Pero este partido no debe servir como ejemplo para los de Aragonés. Principalmente, porque las grandes selecciones, las que siempre acaban ganando, las que hacen buena la máxima de “el fútbol es un juego de 11 contra 11 en el que siempre ganan los alemanes…o los italianos…o los franceses”, esas, son las que no le dejarán jugar tan fácil a la Roja. Porque sus centros del campo son rocosos, porque sus defensas juegan pegadas al borde del área y porque su repliegue en el contraataque es mucho más efectivo que el de los rusos.

Con todo ello, no quiero quitar ningún mérito al gran inicio de Eurocopa de la selección. Pero creo que no debemos engañarnos. España está hecha para jugar de tú a tú contra grandes equipos que apuestan por el balón. Otra cosa será cuando juegue contra selecciones que anteponen el oficio al beneficio del buen juego. Será cuestión de adaptarse.

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